Diana y su arco, que apuntan...
...con sus flechas a...
...el ave Fénix raptando a su amado.
Pues es que, bastardito, lo que te traemos es toda una historia de amor prohibido: según el mito, Diana estaba enamorada de un pastor llamado Endimión, al que visitaba todas las noches, y cuando Zeus se enteró de este romance, mandó al Ave Fénix para secuestrar al joven para que los enamorados no pudieran verse nunca más. Lo que nos cuentan la leyenda y los tejados de Gran Vía es que la diosa no renunció a este amor y fue tras el Ave, atacándole con flechas intentado rescatar a su amado del secuestro.
Te dejamos averiguar por tu cuenta el final de esta historia, mientras planeas cuándo vas a recorrer estos lugares tan "instagrameables" (casi tanto como nuestro hostel) donde las aceras y el cielo de Madrid se unen para contar el mito de Diana y el arco.
Atlas: el cielo sobre sus hombros
Escultura del Ahorro
En esta ocasión desde el número 60 de la Gran Vía, nos encontramos con El Romano o la "Estatua del Ahorro", estatua que lleva ahí desde el año 1930... ¡ya son años!
Esta obra hace referencia al trabajo y al ahorro, y tiene sentido, porque está donde en algún momento se encontraba el Banco Hispano de Edificación, dañado tras la Guerra Civil española, aunque la escultura sobrevivió milagrosamente a los bombardeos, lo que le da un mérito especial.